AMIGA, NO | Por qué hacer blackface para Halloween te convierte en un imbécil universal
Porque no basta sólo con un AMIGA, NO esta semana, mi hermana se rajó con esta entrada para aportar al amor y respeto de la sociedad, sobre todo en esta época, donde la gente suele apropiarse de culturas a diestra y siniestra para disfrazarse. Onda, imagínense a un niñito gringo disfrazado de huaso pidiendo dulces AIN’T GONNA HAPPEN.
Por Victoria Grayson.
El otro día, conversando con unos amigos, pregunté al pasar qué tenían planeado para Halloween. Casi todos ya tenían armado algo, carrete piola, ida a la Open, salir con los hijos- hermanos chicos- sobrinos a pedir dulces, y todos con un factor común “qué bacán disfrazarse de grande sin que te miren como loco”.
Estábamos dándonos ideas de disfraces chistosos cuando un conocido (amigo del amigo, típico) dijo que se iba a disfrazar de “haitiano”. “¿Cómo así?” le preguntó el amigo que lo llevó… “Me pinto la cara negra y salgo con un Super8 en la mano poh… jajajaja!”. Yo supongo que esperaba una carcajada general como respuesta, pero se encontró de frentón con un silencio y caras de “qué xuxa” que no se imaginó. Insistió con la talla, que la iba a reventar, que todos se iban a reír, que iba a ser la sensación. Pero de respuesta, nada… silencio… hasta que no me aguanté y le dije “estai webeando, ¿cierto?”.
Y no, no estaba webeando. Le parecía la mejor idea del mundo.
Esta no es la primera vez que tengo que explicar por qué maquillarse para aparentar ser de otra raza es ofensivo, condenable y, de frentón, imbécil. Ojo que no lo culpo, él no lo sabía y hay personas que aún tiran el argumento de que es “ponerle color” porque “solo es un disfraz”, es para “divertirse” y “no le hace daño a nadie”. Pero si, si hace daño, es una ofensa que incluso tiene nombre: BLACKFACE, y que ha obligado a personalidades de todo ámbito a disculparse públicamente por hacerlo.
Tomando en cuenta la diversidad cultural que vivimos hoy, se hace más que necesario educarse un poco sobre lo que es el “blackface” y por qué en el Chile actual, debemos educarnos y evitar esta práctica que años atrás ni siquiera sería anecdótica y que, al día de hoy, hay gente que aún lo toma muy livianamente.
El término blackface hace referencia al maquillaje que se usaba antiguamente para representar a una persona de etnia negra africana en obras teatrales y shows. Esto porque no existían actores de raza negra, porque, recordemos, eran esclavos. Con esta representación “artística” se intentaba ocultar lo terrible de su situación, mostrándolos como personas entretenidas y felices, muy alejados de la realidad social en la que vivían.
Más adelante se usó como recurso cómico incluso en películas de Hollywood, haciendo énfasis en los estereotipos del “delincuente”,” ignorante”, “madre soltera”, y “gente de servicio”.

Sir Laurence Olivier en el papel de Othelo, haciendo blackface en el protagónico (año 1965)
Hasta hace poco, la cantidad de gente con rasgos latinoafricanos que vivía aquí era muy poca, sin embargo, con la globalización y los movimientos migratorios recientes, hemos recibido mucha gente “más morena” de lo que estábamos acostumbrados. Estas personas vienen en busca de un mejor futuro y, claramente, la gran mayoría viene a realizar trabajos con un bajo nivel de ingresos y mucho esfuerzo. Ellos deben lidiar todos los días con el racismo y la ignorancia de la gente mientras tratan de hacerse una vida.
Ahora, imaginemos que salimos a la calle con nuestro amigo con la cara pintada negra y un Super8 en la mano, carreteando, cagaos de risa y nos cruzamos con un haitiano trabajando en la venta de estos confites. Mientras nosotros en ese momento tratemos de convencerlo que es sólo una forma de divertirse y de “mostrar sentido del humor”, para él será hiriente y violento; un recuerdo evidente de los estereotipos que le imposibilitan ser considerado una persona como cualquier otra.

Mina disfrazada de “negra”. Nótese el poto falso, vestido extremadamente corto y joyas de oro. Estereotipada a morir.
Para ser claros, esto no se trata de ser “políticamente correctos” si no de comprender cómo algunas elecciones de disfraces promueven estereotipos dañinos, menosprecian las tradiciones de grupos marginados o envían el mensaje de que está bien imitar el aspecto de otras culturas “por diversión” cuando estas personas enfrentan la discriminación cotidiana por solo ser ellos mismos.
Esto incluso puede extenderse a otros grupos que sufren segregación y violencia, como los típicos disfraces de “maricón”, “nana”, “travesti”, “gordo” y así. No se trata de ser amargado o aguafiestas, es sólo tener dos dedos de frente al momento de elegir cómo divertirte. Habiendo tanto material y siendo dotados de inteligencia e imaginación, hay que ser bien aweonao como para terminar defendiendo un disfraz ofensivo en pos del #humor.
Para que vean que hay formas de disfrazarse de alguien de raza negra sin caer en la ignorancia y/o imbecilidad, les dejo unos ejemplos muy bacanes.
[DISCLAIMER: No, disfrazarse de “blanco” no es ofensivo. Para ser ofensivo debe tratar de usarse para “diversión” el estereotipo de un grupo discriminado y/o minoritario. Recordemos que los blancos, rubios de ojitos azules cuentan con el privilegio de ser la “estirpe dominante” por siglos]
? Poster de uno de los shows de la compañía de William H. West (año 1900), que incluía actores haciendo blackface.
? La actriz Julianne Hough tuvo que pedir disculpas públicas en 2013 al presentarse en una fiesta de disfraces como el personaje “Crazy Eyes” de OITNB, pero haciendo blackface. Alegó ignorancia, igual no salió bien parada.
?Ejemplos de que se pueden hacer disfraces de personas y/o personajes de etnia negra sin usar blackface ?

Una pareja de pololos como Jay Z y Beyoncé.

Ellen Degeneres como Nikki Minaj.

Miley Cyrus como Lil Kim en los MTV Music Awards de 1999
Así que ya saben amiguitos, no caigan en esta estupidez; no sacrifiquen su honor de ser humano por tratar de hacerse los chistositos. Tampoco abusen de las culturas ajenas a la nuestra (estoy esperando los trajes interminables de calaveras Mexicanas, Geishas, Gitanas, y un largo etcétera), porque es lo mismo que si un extranjero se disfrazara de Rapa Nui, Mapuche, Huaso o inclusive alguno de nuestros personajes propios chilenos.