El traje típico que lucirá la Miss Universo Chile y lo kitsch que puede llegar a ser
María Jesús Matthei, nuestra representante en el certamen, usará un diseño de Eduardo Cerda, inspirado en los chinchineros, personajes tradicionales y de la cultura pop de Chile. Cuando me lo comentaron pensé que sería una súper buena idea, pero cuando lo vi, me caí del espanto…
Es que NOPE. Demasiado en sólo un atuendo. Un enterito con estampado de copihues (que en el boceto parece tapizado de sillón), flecos en las mangas, “pelos”(?) en los hombros, un sombrero con plumas gigantes… TOO MUCH. Porque a todo eso, sumémosle la joyería (porque siempre usarán joyas vistosas) y el aparataje de la espalda, que más encima lleva una bandera de Chile en lo alto.
¿Se imaginan en medio de la muestra del traje, se le enredan las plumas con la bandera y termina sin el sombrero?
Visualmente, el traje me parece una exageración. Como que Cerda quiso hacerlas todas en una sola y no pues. Mientras menos a veces es mejor. Acá le puso mucho empeño, y no vamos a decir que es un diseño de alta costura, porque raya en lo kitsch.
Si hay copihues por montones, ¿para qué repetir uno gigante en el tambor? Y si hay un implemento cerca de la cabeza (los platillos y la bandera) ¿por qué entrar a recargar con un sombrero tan vistoso? No era necesario.
Y LOS FLECOS. ¿Seguimos en 1985? Chiquillos diseñadores, en alta costura no quedan bien, y menos si entran a recargar la pieza final, como en este caso.
Sinceramente creo que el diseño podría ser mucho mejor si no fuera tan exagerado y tuviera un poco más de elegancia. Una pizca de buen gusto. Menos estampados, menos de todo. Dejémosle los hombros con pelos y saquemos las plumas. ¿No creen que quitándole un poco de elementos y con tela más lisa se vería mejor? ¿Qué opinan ustedes?